Actualmente, la comunicación visual cobra fuerza y se transforma paralelamente a los avances tecnológicos. Los medios de comunicación virtual impactan en la sociedad definiendo valores y tendencias a seguir: lo que es bueno de lo que es malo, lo que existe y de lo que no desean que exista.
De manera cotidiana la comunicación virtual nos facilita la
interacción con diferentes actores de la sociedad en todos los ámbitos a través
de las redes sociales, comunidades, blogs y foros que finalmente permiten
compartir ideas y exponer acuerdos y desacuerdos respecto a lo que nos agrada o
perjudica. Podemos obtener entrenamiento, educación e información de cualquier
tema. Incluso es factible expresar sentimientos, reclamos e interrogantes
personales si nos atrevemos a hacer y muchas encontraremos respuestas positivas.
Sin embargo, a pesar de las múltiples ventajas que ofrecen los
diferentes espacios virtuales no podemos minimizar los riesgos de estos. De los
principales: el anonimato que ofrecen estos medios es uno de los motores de
delitos y violencia hacia otros usuarios. Además de la tan mencionada
despersonalización de los individuos que buscan interactuar a través de estos
medios ante la falta de integración en la sociedad offline. A lo anterior se
suma la falta de certeza en la información que consultamos así como la
presencia de sitios apócrifos que se desarrollan con la intención de robar
nuestros datos personales.
Convertirse en usuario de las diferentes herramientas de comunicación
virtual nos obliga a conocer las ventajas y desventajas de las mismas, así como
verificar la protección de nuestros datos para ser emisores y receptores calificados en esta aldea global.